Los ‘kamikazes’ provocan una media de 130 accidentes anuales y 30 muertes
Francisco López, padre de Víctor López, víctima del conocido como ‘kamikaze de la M-50’, se suicidó el martes ahorcándose en una pista de baloncesto de Rivas-Vaciamadrid. Al parecer la levedad de la condena para el conductor que provocó el accidente y su depresión, le condujo a ese terrible final. Sin embargo, hay una realidad que subyace detrás de estos accidentes y cuyas cifras hablan por sí solas: en España los ‘kamikazes’ provocan una media de 130 accidentes anuales y 30 muertes.
La Dirección General de Tráfico es clara en este sentido y nombra a estas personas como conductores en conducción contraria y que coloquialmente los conocemos como Kamikazes. Pero las cifras evidencian por otra parte una segunda lectura: es inaceptable no tomar medidas más contundentes para evitar este tipo de situaciones que acaban cada año con la vida de treinta personas.
En este sentido, el Instituto Universitario de Tráfico y Seguridad Vial (Intras) ha registrado a este tipo de conductores por sus conductas variadas como homicidas, al pagado, al desequilibrado o con comportamientos desajustados, el resentido, el aburrido, el toxicómano, el erróneo, el imitador, violento, fugitivo y suicida.
Los registros datan también que tras realizar los controles un alto porcentaje de estos kamikazes suele dar positivo en alcholemia en sangre y en los últimos años además, ha ido creciendo el número de personas que provocan estos accidentes por encontrarse también bajo los efectos de las drogas. En otra medida de casos menor la DGT detalla otros casos como las imprudencias de no haber dormido lo suficiente, despistes o incluso, las confusiones al entrar en la. vía en un tramo en dirección contraria.
Este jueves se conocía que Francisco López, padre de Víctor López, víctima del conocido como ‘kamikaze de la M-50’ se suicidaba. La sentencia de este caso se pronunció el pasado día 15 de octubre con una condena de ocho años de prisión para Kevin Cui, el kamikaze de origen chino. Se consideró probado que el kamikaze de la M-50 era “plenamente consciente” del riesgo para la vida que conllevaba su conducta.
Las estadísticas indican también que la mayoría de estos «accidentes» provocados se producen entre la medianoche y las cuatro de la madrugada, principalmente los días del fin de semana.
La normativa de tráfico estipula que los casos juzgados por vía penal que son asociados a una conducción temeraria y además, unida al consumo del alcohol o drogas, el conductor será juzgado con penas de entre seis meses y dos años de cárcel y la prohibición de conducir vehículos a motor de uno a seis años